Descripción
Un mosto que nace brisado y fermenta con esas pieles unos cuantos días en inox. Un vino que permanece con sus lías sin remover duranle casi un año, un vino que no se filtra, que se estabiliza por el frío del invierno y que no recibe sulfitos añadidos. Foradada huele a almendras verdes y tiene un punto casi voluptuoso, terpénico, de las pieles. Huele a miel de romero, a hinojo silveslte, a campo de cereal recién recolectado, a girasoles, a camomila seca, a musgo, a pera, a menta limonera, a resina y flor de almendro.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.